La mayoría de las veces pensamos que los problemas o las situaciones que nos toca vivir son consecuencia de una realidad tormentosa que nos persigue, vivimos justificando nuestros aptos y reprochándoles a los demás las cosas malas que nos pasan. Pero ¿por que pensamos que la culpa es de los que están a nuestro alrededor solamente? ¿Será que es más fácil echarle la culpa a los demás de nuestros fracasos? Son preguntas que deberíamos hacernos y reflexionar sobre ellas.
La vida nos hace vivir en una realidad quizás irreal porque a veces lo que percibimos a través de la vista no es siempre lo real, es decir, la percepción de nosotros nunca es igual a la de los demás, por lo tanto la realidad es individual y al pasarnos cosas solo nosotros tenemos la responsabilidad de asumirlas y la forma tan diferente de abordarla nos hace único e inimitable a cada uno de los que vivimos en este mundo.
Es así como debemos buscar las respuestas a estas preguntas dentro de nosotros mismos no fuera, porque es dentro del cerebro donde esta nuestras emociones y percepciones por lo tanto dentro de nosotros están nuestras debilidades y fortalezas que se contrastan para hacernos vivir experiencias agradables y desagradables.
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